Frente a los primeros
resultados de las elecciones municipales, el Partido Comunista Chileno (Acción
proletaria), PC(AP), declara que:
La contundente
victoria de la abstención, que alcanzó un altísimo porcentaje histórico, es
consecuencia del rechazo popular más absoluto a la actual institucionalidad, al
descrédito que existe sobre los dos bloques gobernantes (Alianza = vieja derecha
y Concertación = nueva derecha) es producto, además, de un arduo trabajo de
concientización en amplios sectores, explicando que la abstención era el
rechazo a este sistema excluyente, antidemocrático, antipopular y de la
necesidad de cambiar la actual constitución, de luchar por la nacionalización
de todos nuestros recursos naturales, por la gratuidad y mejor calidad de la
educación, por la no privatización de la salud pública, por una AFP estatal,
etc.
El descrédito y poca
participación en las elecciones anteriores, obligó al duopolio Alianza
Concertación a impulsar la inscripción automática y el voto voluntario, como
formas de darle, al menos, olor a democracia al sistema electoral.
Posteriormente, y pese a la enorme campaña del terror impulsada desde la
concertación, y otros sectores afines, por tratar de hacer creer que la
abstención favorecería a la vieja derecha, esto ha quedado por el suelo,
sin embargo, no fueron menores los esfuerzos realizados por los distintos
sectores neoliberales, para tratar de legitimar las elecciones, a partir de la
masividad de los participantes en las municipales, sin considerar la fuerza de
una política correcta impulsada por los verdaderos comunistas, agrupados en el
Partido Comunista Chileno (Acción Proletaria), PC(AP), que fue asumida por
extensos sectores populares.
De un total de más de
13 millones de chilenos en condiciones de votar en estas elecciones
municipales, sólo votaron un poco más de 5.600.000 aproximadamente, siendo la
abstención por sobre el 70%, a lo que hay que agregar los votos nulos y
blancos, que también son una forma de rechazo a la decadente estructura
electoral actual.
Estas elecciones
siguen favoreciendo al binominalismo, ya que han dejado a partidos y
organizaciones que mantenían ilusiones de irrumpir en el escenario político,
fuera de toda posibilidad de gravitar en la política nacional, dentro de los
espacios del actual modelo electoral, aun separándose de los dos bloques
abiertamente neoliberales, de la Alianza por Chile y de la Concertación.
El inmenso apoyo a la
abstención en las actuales elecciones municipales, donde una inmensa mayoría de
chilenos y chilenas, que son parte de los pueblos de Chile, se negaron a caer
en la trampa electoral, son el rechazo más rotundo, con más del 70% en las
mesas antiguas y del 90% en las mesas de jóvenes, a las políticas
privatizadoras, a una educación de mercado, al negociado de las pensiones a
través de las AFP, a empleos deplorables y una persecución permanente a la
sindicalización, a la persecución y criminalización del descontento social
mediante leyes especiales represivas, a la persecución de los pueblos que
luchan por su identidad, cultura y territorio, a una política de salud que
busca la privatización absoluta, a la venta y negociado con nuestros recursos
naturales y el desprecio por el ecosistema, etc., es decir, el rechazo a la
actual constitución fascista de 1980.
Es hora de comenzar a
pensar y organizar la fuerza que tenemos los pueblos de Chile, a organizar con
mayor fuerza las demandas y aspiraciones de mayores espacios de participación,
es decir, a fortalecer la necesidad de avanzar en el camino de una asamblea
constituyente para una Nueva Constitución con protagonismo popular, donde
las organizaciones sociales y populares deben participar activamente, esta es y
debe ser la campaña que debemos fortalecer y asumir con mayor fuerza posterior
a estas elecciones.
Partido Comunista Chileno
(Acción Proletaria)
PC(AP)
23:30 horas, Domingo 28 de
Octubre, 2012.
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